Raicilla

La raicilla es un destilado mexicano de agave, similar al mezcal y al tequila, pero con sus propias características distintivas. Se produce principalmente en el estado de Jalisco, aunque también en algunas zonas de Nayarit.

Descripción:

• Materia Prima: Se elabora a partir de varios tipos de agave, tanto silvestres como cultivados, como el Agave maximiliana, Agave inaequidens, Agave valenciana, Agave angustifolia y Agave rhodacantha, entre otros. Es importante destacar que no se utiliza el Agave Tequilana Weber Azul, que es el agave del tequila.

• Proceso de Producción: El proceso es artesanal y similar al del mezcal. Las piñas de agave se cocinan en hornos de pozo subterráneos o en hornos de mampostería, se muelen, se fermentan en recipientes de madera, piedra, barro o acero inoxidable, y finalmente se destilan. Este método tradicional le confiere a la raicilla su sabor complejo y a menudo ahumado.

• Tipos: Existen dos tipos principales de raicilla, que se diferencian por la región y los agaves utilizados:

  • Raicilla de la Costa: Se produce en las zonas cercanas al mar y utiliza agaves como el Agave angustifolia y Agave rhodacantha. A menudo tiene notas más ahumadas debido al proceso de cocción en hornos de pozo.

  • Raicilla de la Sierra: Producida en las zonas montañosas con agaves como el Agave maximiliana, Agave inaequidens y Agave valenciana. Su proceso de destilación, influenciado por técnicas españolas, se asemeja más al del tequila.

• Sabor: El perfil de sabor de la raicilla es muy variado, con notas terrosas, herbales, afrutadas y, en algunos casos, ahumadas. Su sabor y aroma dependen del tipo de agave, la región de producción y el método de elaboración.

• Graduación Alcohólica: El contenido de alcohol suele oscilar entre 35% y 55% de alcohol por volumen.

La raicilla es un destilado de agave 100% mexicano y artesanal, con Denominación de Origen en ciertas regiones de Jalisco y Nayarit. A diferencia del tequila y el mezcal, que tienen regulaciones más estrictas en cuanto a los tipos de agave, la raicilla permite la utilización de varias especies, lo que da lugar a una diversidad de sabores y aromas. Es una bebida con una rica historia, producida de forma tradicional y que ha ganado reconocimiento internacional por su autenticidad y complejidad. Es un destilado que representa el patrimonio cultural de México, especialmente de Jalisco, y se considera una "prima" del tequila y el mezcal.